domingo, 24 de febrero de 2013

Llena tus pulmones de aire para gritar: LIBERTAD.

¿Os imagináis un mundo libre? Un mundo justo, un mundo solidario. Un mundo sin guerras ni violencia, sin hipocresías de patriotismos, sin envidias, sin desigualdades, sin odio. Un mundo para todos, donde no importe de donde provengas, ni que idiomas hables, ni el color de tu piel, pues ¿qué importancia tiene eso realmente?, ¿acaso no somos todos seres humanos?, ¿no estamos en este mundo para hacer algo mejor de él? Nos empeñamos en destruirlo y, en consecuencias, nos destruimos.
Deberíamos conservar la poca humanidad que nos queda, deberíamos no continuar avanzando sin rumbo alguno, dando tumbos y tropezando sin llegar a ningún lado, no. Deberíamos deshacernos, reconstruirnos y volver a empezar. Deberíamos renacer de nuevo y poder sentirnos orgullosos de nuestra naturaleza. Vivir acordes los unos con los otros, con todo lo que nos rodea. Por desgracia, estamos obcecados en una estúpida teoría de supervivencia del más fuerte, en vez de ayudarnos a sobrevivir conjuntamente.

Lo cierto es que todo esto no es más que una utopía, pero algo bueno teníamos que tener, y ese algo se llama soñar. Afortunadamente, aún conservamos tal privilegio.







miércoles, 6 de febrero de 2013

Súbito recuerdo de medianoche.

Es curioso lo que llegamos a recodar con el paso del tiempo. A veces recordamos las cosas que, a simple vista, parecen las más estúpidas y menos importantes. Detalles que sencillamente son insignificantes. Sin embargo acaban volviendo a nuestra mente, inesperadamente. Hasta convertirse en un recuerdo valioso.

El recuerdo de aquella singular manía que tenía al comer: quitarse, ligeramente, los zapatos. Simplemente liberar sus talones de sus zapatillas, como si quisiera sentirse un poco menos aprisionado, en busca de, quién sabe, unos minutos lejos de las presiones y de los caminos marcados. O tal vez, no exista una coherente explicación para ello. No obstante, seguirá siendo una de sus llamativas manías, y uno de mis peculiares recuerdos.

Resignación e hipocresía o igualdad, libertad, justicia.


'La resignación es un producto que, como cualquier droga, duerme, duerme a la gente. Duerme a su conciencia'.
'El dominio del poder que se basa un el dominio terrible y duro, el dominio de la mente. Ese opio que cae desde los aparatos de televisor, ese opio que cae desde la sentencia de los tribunales, todos los discursos políticos, que va empapando la mentalidad de la gente y va diciendo "Calla, calla, porque si no callas puede ser peor".'
'Se busca ya, no al ser humano pensante y capaz de la reflexión, de la duda y de la inquietud, se busca al esclavo sin pensamiento'.
'El otro camino: Rebeldía. Pero la rebeldía no es un gesto altisonante, no es un grito, no es un insulto, no es una pedrada, no es una mala contestación. Es mucho más profundo. La rebeldía es un grito de la inteligencia, de la voluntad que dice "¡No me da la gana de decirle que sí a esta actual situación [...] porque entiendo que puede haber otra situación, y por tanto yo no asumo esta podredumbre, y no participo de ella, y lucho contra ella!" Y esta actitud es una actitud intelectual [...] Es un posicionamiento que da fe de la mente y del corazón, del fuego del querer cambiar [...] La rebeldía no es ni más ni menos que el posicionamiento con otros valores y la decisión de hacerle frente. Rebeldía para decir que no aceptamos que la competitividad y el mercado sean los que rijan los destinos de las sociedades.
'Costará mucho tiempo y mucho sacrificio, pero es hermoso el luchar, incluso morir por eso. Porque morir tenemos que morir, ¡muramos por lo menos luchando por un ideal noble y no consumiéndonos como un brasero!'
'Una Igualdad esencial, no igualitarismo, y dignidad de la persona por ser lo que es, persona'.
'Solidaridad, que consiste en afirmar tranquila y serenamente, que no merece la pena luchar por banderas, que la única bandera es la bandera del planeta Tierra, y la humanidad es una sola raza, una sola y única raza, y que merece la pena luchar por ella'.
'¡Levántate y piensa! Es lo más revolucionario que he visto en mi vida, porque la rebeldía empieza aquí, en la cabeza, que dice ¡no sirvo, no me da la gana, no quiero estos valores! Movilización que significa, por tanto, ese esfuerzo por pensar y por hacer pensar'.
'Un hombre culto es un hombre que mira al mundo con mirada independiente y libre'.



"EPPUR SI MUOVE".